Un año más llegaron las Fiesta de Astures y Romanos a nuestra ciudad y participamos con todo nuestro corazón bailando en dos momentos del domingo.
Nuestra primera parada fue ir a bailar delante del stand que la Perrera de Astorga tenía montado en el Mercado. Vino Marietta con su gaita y se puso a tocar la Polka de Manzaneda para que esas voluntarias bonitas y el público asistente pudieran participar de nuestra danza. Siempre es una acaricia al corazón bailar para ellas, pensando en los perros que buscan un hogar.
Y ese gusanito de la impro con Marietta es fantástico porque confiamos en ella y en su gaita. Y como hacía un calor horrible le pedimos una lenta y nos tocó un precioso vals que hicimos tribalero en dos segundos. ;)
¡¡Mil gracias por venir a compartir ese precioso instante con nosotras!!
¡¡Eres un verdadero cielo!!
Y nuestra segunda parada ese día fue el honor de bailar en el acto llamado Bienvenida a la Vida que la Tribu Astur Tiburi organizaba. Una de nosotras pertenece a ambas Tribus así que no pudo bailar pero estuvo con nosotras en el escenario y era la encargada de ordenar a las prisioneras, bailarinas del lejano oriente, que improvisaran unos bailes para salvar sus vidas.
Así que improvisamos dos canciones, una lenta y una más rapidita en un escenario que iba a ser grande pero que al ambientarlo se quedó bastante pequeño, y donde podías quemarte con un fuego de una esquina o quedarte enganchada a unos olivos que había por detrás. Y gracias que nos comentaron que íbamos a bailar sobre pétalos de rosas, pero que pensamos que podían hacer que nos resbaláramos, así que mejor se retiraron. ¡¡De todas formas me parecía una idea preciosa!!
Y al acabar empezaron a tocar las gaitas, nos bajamos del escenario y seguimos bailando. Esa música atronadora se te mete por dentro y te sacude el corazón de una manera que aunque creas que vas a desmayarte por el calor y que los brazos se te van a caer en algún momento, sale una energía de dentro que te impulsa a seguir bailando sin parar.
Se unieron a nosotras María, Nathalie y Nuria vestidas de astures,
y al girar en el círculo la energía se hizo más intensa, más inmensa
y las sonrisas fueron más grandes.
Y conocimos a Vero, de Gijón, que se acercó a saludarnos y nos comentó que ella bailaba danza oriental y que le había sorprendido encontrarse con nosotras. Ya estamos conectadas por el facebook y encima grabó un vídeo de nuestra primera canción. ¡¡Mil gracias!!
Y como siempre muchas gracias a Celeste por sus maravillosas fotos y a toda la gente que vino a vernos.
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